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La presidenta de la Reserva Federal de los Estados Unidos, Janet Yellen, se ha mostrado tan cautelosa como vienen siendo todas sus actuaciones públicas desde que ocupó este cargo, sobre todo si tiene que hablar sobre un tema tan delicado como la subida de los tipos de interés.
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Los tipos más deseados
Desde la primera subida de tipos de interés el año pasado, Yellen aseguró que estábamos simplemente ante el inicio de una constante dinámica de nuevas subidas, con el fin de fomentar las inversiones en Estados Unidos y dejar libre a la economía, para regular la bonanza económica que se auguraba.
Desde entonces, no se han vuelto a subir los tipos de interés. Lo cierto es que el dólar está tan fuerte que ha tenido que frenarse en sus perspectivas, con el fin de que el resto de la economía pudiera recuperarse y alcanzar un ritmo de crecimiento más equilibrado con el estadounidense.
Sin embargo, la situación de la política europea, con el referéndum planteado del Brexit y posteriormente apoyado por los ciudadanos británicos, ha impedido adoptar una postura menos conservadora.
Pese a todo, los tipos de interés al alza es algo que interesa a la mayor parte de norteamericanos y, aunque sea sólo una vez al año, la promesa de esta subida acarreará, como siempre, un mayor fortalecimiento de la divisa.
Cautela preelectoral
Sin embargo, el argumento presentado por Yellen en esta ocasión no ha tenido nada que ver directamente con la economía estadounidense, sino con su política interna.
Las elecciones presidenciales de Estados Unidos tendrán lugar el próximo 8 de diciembre y las encuestas no arrojan el más mínimo signo de certeza entre quién las va a ganar, Hillary Clinton o Donald Trump.
En una situación de tanta incertidumbre, la presidenta de la Reserva Federal ha considerado prudente mantener cautela al menos hasta el próximo mes de diciembre, cuando prrevisiblemente las aguas hayan vuelto a su cauce.
Yellen al menos sí ha tranquilizado a inversores y analistas sobre el estado de salud de la divisa estadounidense. Según se ha podido saber, tanto la economía de Estados Unidos como el propio dólar, están en un momento propicio para que la subida de los tipos de interés tenga lugar, por lo que salvo una sorpresa mayúscula e imprevista, dentro de aproximadamente un mes pasarán supuestamente del 0,5% al 0,75%.
